Una paciente de 14 años tenía una estatura baja desproporcionada con una altura inicial de 132 cm debido a una hipocondroplasia genéticamente probada. Además, una importante deformidad en varo (pierna arqueada) era conspicua en ambas piernas.
Estatura baja desproporcionada
Huesos superiores e inferiores de la pierna cortos en posición de arco
Para mantener una movilidad independiente durante todo el tratamiento, la paciente decidió realizar un tratamiento por etapas de las piernas. En la primera fase, se enderezó la pierna derecha y se alargaron la parte superior y la inferior de la pierna en un total de 15 cm con un clavo de distracción FITBONE. La diferencia temporal de longitud de las piernas entre las fases del tratamiento se compensó fácilmente con una elevación del zapato. Tras la consolidación del hueso alargado en el lado derecho, se realizó el mismo procedimiento en la pierna izquierda 8 meses después. El auto-ejercicio regular mejoró la movilidad, mientras que una férula de posicionamiento utilizada por la noche durante el alargamiento evitó la contractura de la articulación de la rodilla.
Tratamiento final en el lado izquierdo
Clavos de distracción intramedular en la parte superior e inferior de la pierna izquierda
Al final del tratamiento, ambas piernas tenían la misma longitud y estaban rectas, y la amplitud de movimiento de las articulaciones era casi la misma y estaba dentro de los límites normales. La altura del cuerpo era ahora de 147 cm. La totalidad de los costes del tratamiento fueron cubiertos por el seguro médico público.
Proporciones armoniosas tras el alargamiento de piernas en ambos lados
La misma longitud de las piernas en ambos lados después de un alargamiento bilateral de 15 cm.